Juntos por el Perú presenta proyecto de ley para disolver el congreso en caso de una vacancia presidencial
Según el anuncio la congresista Isabel Cortez, de la bancada Juntos por el Perú presentó una iniciativa legislativa conocida como «Ley de Muerte Cruzada». Con este proyecto de reforma constitucional, si el Congreso vaca al presidente por incompetencia moral o física, el parlamento se disolvería automáticamente y convocaría a elecciones parlamentarias. Esta última acción la tomaría el Vicepresidente, quien asumirá el cargo de Jefe de Estado.
En el documento que adjuntó se puede leer que el objeto de la reforma constitucional es “la inclusión del mecanismo por el cual, tanto el Poder Legislativo como el Poder Ejecutivo, al incurrir en alguna causal conforme se señala en la presente norma, pueden disolver al otro, acarreando su propia disolución ipso iure”
Antes de acabar el día les comparto que he presentado el PL de muerte cruzada que comenté en @exitosape. Espero que la Comisión de Constitución agende pronto su presentación para acabar, de una vez por todas, estos aires de vacancia. Si un poder se va, nos vamos todos. No hay más pic.twitter.com/YAp4vH8sks
— Isabel Cortez (@chabelitacongre) October 13, 2021
Además, si el legislativo consiga la vacancia del vicepresidente que ha tomado las riendas del país y no hay quien lo suceda en el cargo, se tendría que llevar a elecciones generales. Así lo precisa la modificación que busca hacer esta ley al inciso 2 del artículo 113 de la constitución.
La legisladora propone este cambio en la carta magna, luego de que la Comisión de Constitución, en un sábado por la noche, durante el feriado largo, haya aprobado por insistencia el dictamen que interpreta la cuestión de confianza. El Pleno tendrá que darle el último visto bueno. Los ministros ya se han opuesto a ese proyecto.
Ahora, el camino que le toca a la iniciativa de Juntos por el Perú es que, primero, sea revisado en la Comisión de Constitución, presidida por la fujimorista Patricia Juárez y por las congresistas Gladys Echaíz (vicepresidenta) y Adriana Tudela (secretaria). De aprobarse, pasaría al Pleno y, como es una reforma constitucional, tendría que aceptarse en dos legislaturas ordinarias con el voto favorable de, al menos, 87 legisladores
